viernes, 5 de junio de 2009

"Contacto letal" de David Quammen

No había vuelto a pensar en la influenza hasta hace una semana, que leí un artículo de David Quammen, en mi revista National Geographic (sí, tengo suscripción, no importa lo ñoño que suene, me encanta). El punto es que este artículo aclaró muchas preguntas que yo tenía sobre este virus A H1N1 o “influenza porcina”. Por ejemplo, descubrí que el paso de enfermedades de animales a humanos ha pasado tantas veces que hasta tiene un nombre: zoonosis. También encontré que este tipo de enfermedades (zoonóticas) son provocadas por uno de los seis tipos de patógenos que existen (virus, bacterias, protozoarios, priones, hongos y gusanos) y que los más peligrosos de éstos, son los virus ya que evolucionan en poco tiempo, son resistentes a los antibióticos, se esconden, causan gran número de muertes y son “diabólicamente simples” según Quammen. Lo divertido es que los virus no posen movilidad, es decir, no pueden ser transportados por sí mismos, sino que necesitan de otros organismos para desplazarse y aún así han logrado recorrer el mundo. Además, estos pequeñines han estado, están y estarán siempre presentes en nuestro entorno, escondidos en huéspedes reservorios (especie que porta en patógeno pero no presenta síntomas), esperando la oportunidad de emerger.

En el caso del virus del hendra, se encontró que el huésped reservorio era una especie de murciélago de fruta, el zorro volador rojo, un simpático animalito que, por lo que se estima, probablemente haya portado el hendra desde hace siglos, quizá milenios. Lo curioso es que los primeros brotes de este virus no se dieron si no hasta los años 90s. Entonces si el virus llevaba tanto tiempo ahí ¿por qué tardó tanto en salir? La única explicación que se ha encontrado hasta ahora es que la destrucción de sus hábitats ha orillado a estos murciélagos a buscar nuevos hogares y a tener mayor contacto con los humanos o con otros animales. En el caso del hendra, el primer contagio registrado fue el de una yegua, que transmitió el virus a sus cuidadores y a los demás caballos que se encontraban en el establo.

Otras enfermedades se contagian, por ejemplo, al matar un animal infectado, como en la matanza ritual de ganado en Bangladesh o en el consumo del mismo como en el caso de Mayibout II, donde personas murieron por haber comido chimpancés infectados.

Parece que el virus A H1N1 no es más que otra de estas muchas enfermedades. Según entiendo, aún no se sabe porque surgió, pero después de leer el artículo, creo tener algunas teorías, suficientes para satisfacer mi curiosidad.

Talvez puedas estar pensando que la naturaleza es cruel al amenazar con tantas enfermedades pero si te detienes a pensar un momento, en gran parte es culpa nuestra. Somos nosotros quienes invadimos y destruimos miles de hábitats; somos nosotros quienes explotamos y acabamos los recursos; somos nosotros los que rompemos el equilibrio natural que existe o existió en nuestro planeta. Nosotros nos lo buscamos y prepárense por que se dice que esto, apenas comienza.



Zorro volador rojo. Foto de Lynn Johnson

3 comentarios:

  1. Un sabio análisis y respuestas contundentes.

    Efectivamente ha avido muchos de estos casos. Lo que llamó la atención de este fue su velocidad de expansión: Estamos de acuerdo que en tan solo 2 semanas se avisó a la población mundial de una "pandemia inminente".

    Lo bueno es que si dejó muchas lecciones a la OMS y méxico sobre lo que se debe de hacer en estos casos.

    ResponderEliminar
  2. No es ñoño, es genial. La gente que piensa que eso es ñoño o "not cool" simplemente no es lo suficientemente profunda.

    Si los animales nos pueden transmitir enfermedades, nosotros en teoría también podríamos estar transmitiéndoles enfermedades sin saberlo, ¿no?

    Hablando de enfermedades, recuerdo un chiste de que la vida es una enfermedad sexualmente transmitida. XDDDD lol esto me saltó a la mente por la gente con el complejo de "furry," si sabes lo que es. (Y si no sabes, tal vez no quieres saber...)

    Sabes, siempre he pensado que la causa de las enfermedades es mucho más profunda que una simple explicación científica; no que la sustituya, pero hay algo más profundo ligado a todas esas explicaciones racionales; físicas.

    La naturaleza no es cruel; sólo justa. Todos los problemas y enfermedades que tenemos los hemos generado nosotros mismos. Incluso dejando a la naturaleza de lado; esto se aplica hasta a un nivel personal...

    ResponderEliminar